Alineamiento con el objetivo global de adaptación del Acuerdo de París

El Acuerdo de París estableció el objetivo global de adaptación (GGA), tal y como se articula en el Artículo 7. Esto requiere que las partes trabajen para mejorar la capacidad de adaptación, reforzar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad a los impactos del cambio climático. Sin embargo, el Acuerdo de París no establece ninguna obligación de informar para demostrar los avances. El Artículo 7.11 establece la Comunicación sobre la Adaptación; un mecanismo voluntario de presentación de informes, que puede presentarse como una sección de la NDC de una Parte.

En la COP28, las Partes adoptaron el Marco de los EAU para la Resiliencia Climática Global, como parte del Consenso de los EAU, que esbozaba 11 objetivos específicos. Estos objetivos pretenden reforzar la resiliencia climática mundial abordando la escasez de agua, la seguridad alimentaria, los efectos sobre la salud, la conservación de los ecosistemas, la resiliencia de las infraestructuras, la erradicación de la pobreza y los medios de subsistencia, y la conservación del patrimonio cultural. El marco hace hincapié en los procesos inclusivos de planificación, implementación y seguimiento, junto con la movilización de recursos financieros, el fomento de la cooperación internacional y la integración de los conocimientos tradicionales. Estos objetivos son voluntarios, pero están concebidos para proporcionar a los países un marco para alcanzar la GGA. La CMA 5 invitó a las Partes a incluir voluntariamente los objetivos cuantitativos y/o cualitativos del Marco y las consideraciones transversales en sus comunicaciones de adaptación, informes bienales de transparencia, planes nacionales de adaptación, comunicaciones nacionales y Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional.

La CMA5 también estableció el programa de trabajo UAE-Belém de dos años para identificar y desarrollar indicadores de adaptación y metodologías para medir el progreso hacia los objetivos adoptados en relación con la AGA. Este programa ayudará a informar sobre el modo en que las Partes deciden presentar sus progresos en materia de adaptación, buenas prácticas, experiencias y lecciones aprendidas en la aplicación del Marco de los EAU, como parte de sus NDC y otros informes.

El Artículo 7.9 del Acuerdo de París exige que “Cada Parte, según proceda, participará en procesos de planificación de la adaptación y en la aplicación de medidas, incluida la elaboración o mejora de planes, políticas y/o contribuciones pertinentes”, aunque no se exige explícitamente la elaboración y aplicación de planes nacionales de adaptación (PNA). El Artículo 9.1 del Acuerdo de París establece que “Las Partes que son países desarrollados proporcionarán recursos financieros para ayudar a las Partes que son países en desarrollo tanto en lo que respecta a la mitigación como a la adaptación, como continuación de sus obligaciones existentes en virtud de la Convención”, al igual que la intensificación de los esfuerzos de adaptación en respuesta a los resultados del Balance Mundial, tal y como se establece en el Artículo 14.

Tras el primer Balance Mundial, los países deben reflejar sus resultados y recomendaciones en su NDC 3.0 (según el Artículo 4.9 del Acuerdo de París). En cuanto a la adaptación, el GST “Reconoce los crecientes esfuerzos de planificación e implementación de la adaptación que están llevando a cabo las Partes para mejorar la capacidad de adaptación, reforzar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad, tal y como se establece en los planes nacionales de adaptación, las comunicaciones de adaptación y las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional, según proceda” (Apartado 44) . También reconoce la “los esfuerzos significativos de las Partes que son países en desarrollo para formular y aplicar planes nacionales de adaptación, comunicaciones sobre la adaptación y contribuciones determinadas a nivel nacional, según proceda, mediante su gasto interno, así como sus mayores esfuerzos para alinear sus planes nacionales de desarrollo“ (Apartado 45) . Apartado 44 “acoge con satisfacción que 51 Partes hayan presentado planes nacionales de adaptación y 62 Partes hayan presentado comunicaciones de adaptación hasta la fecha”, demostrar la ambición de los países Partes para actuar en materia de adaptación, ya que estos mecanismos de información son voluntarios.

El GST subraya la necesidad de enfoques globales y holísticos para abordar los impactos climáticos y las lagunas de adaptación, destacando dos áreas:

1. Párrafo 55: “Alienta la aplicación de soluciones integradas y multisectoriales, como la gestión del uso de la tierra, la agricultura sostenible, los sistemas alimentarios resilientes, las soluciones basadas en la naturaleza y los enfoques basados en los ecosistemas, y la protección, conservación y restauración de la naturaleza y los ecosistemas, incluidos los bosques, las montañas y otros ecosistemas terrestres y marinos y costeros, que pueden ofrecer beneficios económicos, sociales y medioambientales, como la mejora de la resiliencia y el bienestar, y que la adaptación puede contribuir a mitigar los impactos y las pérdidas, como parte de un enfoque participativo y con perspectiva de género impulsado por el país, basado en los mejores conocimientos científicos disponibles, así como en los conocimientos de los Pueblos Indígenas y los sistemas de conocimientos locales“.
2. Párrafo 49: “Reconoce que el establecimiento y la mejora de los inventarios nacionales de los impactos climáticos a lo largo del tiempo y la creación de sistemas de servicios climáticos accesibles y dirigidos a los usuarios, incluidos los sistemas de alerta temprana, pueden reforzar la aplicación de las medidas de adaptación, y reconoce que un tercio del mundo no tiene acceso a los servicios de alerta temprana e información climática, así como la necesidad de mejorar la coordinación de las actividades de la comunidad de observación sistemática“.

El GST subraya “la importancia de la solidaridad mundial a la hora de emprender esfuerzos de adaptación -incluida la adaptación transformacional e incremental a largo plazo- para reducir la vulnerabilidad y mejorar la capacidad de adaptación” (párrafo 61) y “la importancia del ciclo iterativo de adaptación para crear capacidad de adaptación, reforzar la resiliencia y reducir la vulnerabilidad” (párrafo 54). Hace un “llamamiento a las Partes que aún no lo hayan hecho para que establezcan sus planes, políticas y procesos de planificación nacionales de adaptación antes de 2025 y hayan avanzado en su aplicación antes de 2030“ (párrafo 59) y subraya que “dichos esfuerzos deben ser inclusivos… teniendo en cuenta los mejores conocimientos científicos disponibles y las cosmovisiones y valores de los Pueblos Indígenas para apoyar la consecución del objetivo mundial de adaptación” (párrafo 61).

En resumen, el GST refleja la urgencia de la adaptación, sobre todo en referencia a la eliminación de la brecha de adaptación. Esto incluye la adopción del Marco de los EAU para la Resiliencia Climática Global,que establece 11 objetivos que deben alcanzarse para 2030, (párrafo 16) “invita a las partes a incluir voluntariamente…información cuantitativa y/o cualitativa relacionada con los objetivos…y las consideraciones transversales“ en sus informes nacionales. El GST también refleja elementos clave, como hacer hincapié en los enfoques inclusivos e impulsados por los países y movilizar los medios adecuados para su aplicación, incluyendo la financiación, la transferencia de tecnología y la creación de capacidades. El GST también subraya la importancia de la cooperación internacional, el compromiso de las partes interesadas y unos mecanismos de revisión sólidos para seguir los avances y abordar los retos, subrayando la responsabilidad colectiva de abordar los riesgos climáticos.